
Nuestros camiones eléctricos de construcción están diseñados con un bastidor de batería flexible y reforzado para garantizar una mayor seguridad del paquete de baterías durante la operación. Su estructura ligera mejora tanto la capacidad de carga útil como la autonomía. A plena carga, el camión puede alcanzar una autonomía de hasta 120 kilómetros.
Estos vehículos eléctricos de servicio pesado ofrecen una alternativa confiable y ecológica para aplicaciones de construcción, minería y municipales, sin comprometer el rendimiento en entornos de trabajo difíciles.